Salud y viajes

Viajar es sin duda uno de los placeres de la vida. Tomar distancia de los problemas cotidianos, conocer nuevos destinos, entrar en contacto con la naturaleza, otras culturas, nos da una amplitud de pensamiento, otra perspectiva. La vida moderna, aún con su hiperexigencia, nos abre las puertas del ocio turístico y con él una buena manera de reconfortar nuestro espíritu. Es importante sin embargo, no perder de vista los cuidados básicos que cada viajero debe preveer teniendo en cuenta su condición previa de salud, su edad, el medio de transporte, el estilo de viaje y por supuesto, el destino elegido. El objetivo es que el placer de viajar no se vea empañado por desagradables imprevistos que pudieran afectar nuestra salud eclipsando el beneficio buscado.